Memoria del bosque

miércoles, 11 de agosto de 2010

 Memoria del bosque

Francisco Álvarez Velasco



Ya viene la blanca niña,
ya viene la niña blanca
al pie de la fuente fría
que por el oro manaba
(Romance de la Danza Prima)


En la lenta memoria de este bosque
de corazón plural, común a tanta vida
de líquenes y musgos,
denso perfume del laurel sagrado,
hojas tiernas de mayo,
o ramas neblinosas del invierno,
se han perdido las sendas por donde el hombre iba
y la choza en el claro no encuentra el peregrino,
y la yedra ha escondido las letras amorosas,
las que ciñen las limpias cortezas de abedules.

Hay, en cambio, una fuente
lustral y clara y fría,
esa que suena insomne y recuerda la historia
de aquella blanca niña.